Sunday, February 28, 2010

Friday, February 5, 2010

Guerra a los Kilos de más


¡Guerra a los kilos de más!
Te ofrecemos unos cuantos consejos para combatir el aumento de peso tras las vacaciones

Llega septiembre y, tras las vacaciones, comprobamos que... ¡no entramos en la ropa! Y es que los excesos del verano pasan alguna que otra 'factura'.
¡Qué dura es la batalla contra los kilos de más! Además, después de las vacaciones, algunos excesos se notan al ponerse la ropa de entretiempo. La buena vida ha hecho mella en tu figura y, confiésalo, te has empezado a desesperar al ver que la aguja de la báscula no baja pese a tus esfuerzos. ¡Que no cunda el desánimo! Te damos unos pequeños trucos para perder peso de una forma ordenada y eficaz, pero recuerda que debe ser tu médico quien te indique la dieta a seguir. Estos trucos pueden ayudarle. ¿Te animas a ponerlos en práctica?
Seguro que ya lo sabes, pero no hay que dejar de repetirlo: junto a una alimentación sana, equilibrada y sensata, la mejor y más efectiva forma de perder peso es hacer al menos media hora de ejercicio moderado, pero a buen ritmo. Por ejemplo, vale andar, siempre y cuando se haga rapidito, no a velocidad de paseo. Hacer ejercicio no siempre significa acudir a un gimnasio. Basta con introducir más movimiento en la vida diaria, sea andando a buen paso o incluso bailando. Es más, si quieres seguir una tabla de ejercicios en casa que te ayuden a poner tu cuerpo a punto, no te pierdas nuestra calculadora de ejrcicios. ¡Más sencillo, imposible!
• Si como base de tu dieta incorporas alimentos con gran contenido en agua, como las frutas y las verduras frescas y los hidratos de carbono de liberación lenta (fibra en los cereales, lentejas, judías y verduras frescas) irás progresivamente perdiendo peso. Si, además, evitas los hidratos de carbono de liberación rápida (dulces, miel, productos lácteos), todavía mejor.
• Los refrescos azucarados, el alcohol, los alimentos preparados y la bollería industrial son auténticas bombas calóricas que conviene evitar si quieres perder peso.
• Procura dividir la ingesta diaria en cinco comidas, con un desayuno consistente, un almuerzo medio y una cena muy ligera, con un tentempié suave (una pieza de fruta o un yogur desnatado) a media mañana y a media tarde.
• Olvídate de los fritos, y opta por hacer los alimentos a la plancha y al vapor. También puedes recurrir a otro recurso que, además, te permitirá ahorrar aceite en la sartén: usa un pincel para extenderlo y así conseguirás sólo una capa muy, muy fina.

La Flacidez


El truco del día: ¿quieres decirle adiós a la flacidez?
Las cremas reafirmantes y el ejercicio físico son dos elementos fundamentales para combatirla

El abdomen es una de las áreas que más padece este problema.
Glúteos, senos, brazos o, especialmente, el abdomen. Ellos son los principales 'damnificados' por la flacidez. Y seguro que has notado que cuando la piel se queda flácida, pierde tersura. La obesidad, los embarazos repetidos y la vida sedentaria son los grandes enemigos de nuestro abdomen. Pero no hay que tirar la toalla, pues, afortunadamente, su piel es muy agradecida, posee gran cantidad de fibras elásticas y una gran capacidad de recuperación. Si realizamos gimnasia regularmente, ejercicios posparto e hidratamos la piel suficientemente, conseguiremos retrasar la aparición de la temida flacidez y evitaremos la formación de estrías.

Pero, ¿por qué aparece? La flacidez es consecuencia de la degradación de las fibras que sostienen la piel; es decir, del colágeno y de la elastina. Cuando la piel se queda flácida, pierde tersura, y la grasa que hay por debajo puede aparecer en forma de los famosos hoyitos de la “piel de naranja”. La constancia y la fuerza de voluntad son fundamentales para lucir una figura de ensueño de cara al verano.
• Hay que distinguir si la flacidez de la que habla es puramente cutánea, como la que se produce tras una gran pérdida de peso o un embarazo. En este caso, la mejor opción para luchar contra ella es el empleo de cremas reafirmantes a diario y, como ayuda extra, nada como finalizar cada ducha con agua fría, lo que tonifica y refuerza la piel.
• Si la flacidez es, sin embargo, producto de una falta de tono muscular, nada como los abdominales para devolverles su firmeza. Para obtener mejores resultados en sus ejercicios, recuerde que debe ir variando los mismos y aumentando su dificultad, la única forma de ir progresando y fortalecer los músculos, sin estancarse en un mismo nivel. Es importantísimo que este tipo de ejercicios se realicen de forma muy rigurosa y exacta, para no dañar los músculos de espalda y cuello. Además, debe ejercitar tanto los abdominales superiores e inferiores como los oblicuos, a menudo olvidados, y que, bien tonificados, dan definición a la cintura.

Tuesday, January 26, 2010

Zanahorias, muchas vitaminas y pocas calorías







Zanahorias: muchas vitaminas, pocas caloríasSu escaso aporte calórico convierte a esta hortaliza en uno de los mejores aliados para depurar el organismo En estado natural, las zanahorias tan sólo aportan al organismo 37 calorías por cada 100 gramos de producto. Después de los grandes festines gastronómicos propios de la Navidad, muchos son los que deciden comenzar el año cuidando un poquito su alimentación para depurar el organismo. En este sentido existen alimentos que se convierten en aliados perfectos para conseguirlo. Es el caso de las zanahorias, que aunque podemos encontrarlas en los mercados durante todo el año, es en invierno cuando encuentran su mejor momento.

Y es que 100 gramos de esta hortaliza tan sólo aportan al organismo 37 calorías. Pero además de sus beneficios para la línea, no debemos olvidar sus grandes propiedades saludables gracias a su alto contenido en vitaminas, minerales y carotenos (‘culpables’ de su llamativo color naranja’).

ALGUNOS CONSEJOS

Si las compras en bolsa de plástico, sácalas al llegar a casa y mantenlas en un lugar fresco (al guardarlas conviene limpiar su superficie con un trapo húmedo).

Las pequeñas se pueden tomar sin pelar, simplemente lavadas.

Hay quien, en vez de pelarlas, las raspa con un cuchillo, lo cual hará que conserven todo su valor en vitaminas y sales minerales, pero debes saber que de esta forma tendrán un sabor algo más amargo.

En caso de tenerlas que conservar durante un tiempo largo, ponlas entre capas de arena en un recipiente grande.

Si añades un pellizco de azúcar al agua de su cocción estarán mucho más sabrosas.

Si las vas a comer ralladas, rocíalas con zumo de limón para evitar que se oscurezcan.

Si las vas a hacer cocidas, calcula de diez a quince minutos, según el grosor.